A la vista de los resultados obtenidos en Europa se decidió continuar esa política con instituciones dentro de la ONU que canalizaran ayudas similares a las entregadas por el Plan estadounidense. Por lo que al Grupo Banco Mundial respecta, existe una corriente de pensamiento crítica, no ya los intereses pedidos o los avales exigidos, sino con la propia existencia de dichas organizaciones y el dinero que ofrecen, aun suponiendo que fuese a fondo perdido.