Allí preguntamos si alguien podía llevarnos al hotel de sal. En la calle no había nadie ni manera de llamar al hotel. Un frío que me recuerda al inicio de mi viaje en Alaska a orillas del Océano Ártico hace unos meses miles de kilómetros hacia el norte de camiseta portugal 2022 donde me encuentro. Mes y medio antes había entrado por el puesto fronterizo del norte cerca de San Pedro de Atacama.