Al deporte rey, hasta hace no demasiado, se jugaba con camisetas y pantalones ceñidos, chándales muy poco estéticos y botas absolutamente homogéneas. Por lo general, aquellas personas que usan este tipo de nombres para sus equipos, saben que quizás no van a ganar ningún torneo, y su única motivación es poder quedar los fines de semana con los amigos y echar un rato haciendo ejercicio con el deporte que más les gusta.