Bellerín (Barcelona, 1995) es un dedicado seguidor de la moda, parafraseando ahora a los Kinks. Como fiel seguidor del club blanco, sabes perfectamente que perteneces a un equipo de ganadores. El Olympique de Marseille volvió a ganar en Francia con el título de Campeón de Francia en 2010 y sus 3 victorias consecutivas en la Copa de la Liga en 2010, 2011 y 2012. Un verdadero club de extremos con su récord nacional de 10 Campeonatos de Francia, 10 Copas de Francia, 3 Copas de Liga y 3 Trofeos de Campeones, sudadera real madrid OM siempre puede contar con el apoyo de sus fieles seguidores. En cualquier caso, lucirás el escudo de un pedazo de club. Se la traen al pairo las convenciones y los estereotipos de género (este año ha sido imagen de la colección de mujer de Louis Vuitton). Virgil Abloh (Illinois, 1980) es el diseñador que más titulares ha dado este año gracias a su debut como creador de las colecciones masculinas de Louis Vuitton.
Lo hizo en ambas ocasiones en El Molinón, puesto que, hasta entonces, camiseta barça 2022 era el equipo de casa quien cambiaba el uniforme en caso de coincidencia de colores con el visitante. Barça ante el Real Betis . Ante unas 3.000 personas, el combinado empató a tres contra Portugal. Hasta que llegó él, las únicas posturas aceptables de un actor ante la moda eran o la indiferencia o el desdén. Últimamente, David Beckham (Londres, 1975) ha condensado su granado historial de moda en una limpísima elegancia que mezcla sastrería y minimalismo. Carlos tiene una camiseta firmada en su bar, El Cordobés , donde Mounir es habitual. El cuello redondo y los extremos de las mangas son de color azul, mientras que el resto de la camiseta blanca presenta motivos tono sobre tono, que simbolizan la radiante ciudad de Marsella. Si entendemos que un ídolo es alguien a quien uno admira, Olly Alexander (Inglaterra, 1990) es la estrella pop a las que el resto de las estrellas pop deberían parecerse. Ha sobrevivido a las marcas de celebridades, a la metrosexualidad, a sus propios diamantes en los lóbulos…
¿Recuerdan cuando los raperos solo vestían con camisetas enormes, como de centro comercial, y accesorios llenos de diamantes? Esta generación ha sabido retomar el aluvión de neones y brillos de principios de los 2000 que dominaron a sus predecesores, pero también se ha movido como pez en el agua a través del normcore, ese estilo que ha querido democratizar la imagen con un estilo que evocara alta moda con ropa deportiva. El siglo XX fue el de la moda por antonomasia, la era de los diseñadores, en la que la alta costura llegó a su cénit al tiempo que la moda se hacía más asequible a todos los estamentos sociales. El hijo de Will Smith, Jaden (California, 1998), tiene pedigrí actoral, pero aún mayores credenciales de moda. El actor de ‘Élite’ Omar Ayuso (Madrid, 1998) sabe llevar una camiseta blanca de doscientas maneras distintas, y luego se viste de rockero de Saint Laurent y también funciona. Todos tienen una historia que contar. Ha protagonizado algo que admiramos profundamente: dejar de parecer el típico futbolista para parecerse, primero, a un futbolista bien vestido, y segundo y mejor, a sí mismo. Son muy loables los esfuerzos del futbolista español del Arsenal Héctor Bellerín por ser, como decía Baudelaire, absolutamente moderno.